Nos encantan
A la mayoría de las mujeres nos vuelve locas, vemos unos zapatos de tacón y se nos van los ojos, y la mayoría de esa mayoría, tenemos varios pares de zapatos de tacón en casa… QUE NUNCA NOS PONEMOS.
Pero no sólo nos gustan a nosotras… a ellos, les fascinan. Y no por el mismo motivo. El tacón es uno de los fetiches más conocidos; a los ellos “LES PONE”. La sexualidad que desprenden es muy fuerte. En los espectáculos diseñados para hombres, las mujeres llevan tacón de aguja, por supuesto. Somos como diosas, altas, esbeltas, fuertes, con paso firme…
¿Habéis probado hacer el amor con tacones puestos? Es algo que hay que probar, aunque al hombre no le gusten especialmente los tacones, si ven a una mujer en ropa interior y tacones, su excitación es más fuerte de lo habitual, ¡ah! y prueba también a quedarte solo con los zapatos.
¿Será porque la mujer nos sentimos poderosas cuando nos subimos a ellos?
Los médicos informan que el tacón es malísimo para salud (pies, piernas, espalda, circulación…), pero estudios recientes han demostrado que andar con tacones es bueno para el suelo pélvico. Entonces, un uso moderado…
Hay firmas de zapatos creados solo para fetiche. Hay firmas que crean zapatos que incitan al sexo, con unas plantillas especiales en las plantas de los pies que estimulan los nervios. Desde los años 50 los tacones han movido el sexo, la pasión, la fantasía. Un dato, la palabra fetiche significa “hechizo”.
Todos los hombres tienen sus preferencias y la mayoría tiene al menos un fetichismo moderado, es nuestro deber descubrirlo. Hasta el Príncipe de Cenicienta tuvo su momento fetiche cuando le colocó a su amada su zapatito de cristal.